Este 08 de marzo es un momento especial para reflexionar sobre el rol de la mujer en el mundo laboral y los avances que hemos logrado en términos de equidad. Como profesional con más de 23 años de trayectoria, he sido testigo de cómo la presencia femenina en la industria ha crecido y se ha fortalecido.
Cuando inicié mi carrera, era difícil encontrar mujeres en puestos de liderazgo a quienes aspirar. Hoy, creo que la paridad es más evidente en los niveles operacionales, pero a medida que se asciende a cargos de mayor responsabilidad, como gerencias y liderazgo, la presencia femenina tiende a diluirse. Actualmente, lidero un área dentro de una empresa multinacional, y valoro profundamente la importancia de que ambos sexos tengan las mismas oportunidades. En Valmet, el desempeño y los resultados son los que abren oportunidades, y esto es clave para seguir construyendo un entorno de trabajo verdaderamente equitativo.
A medida que nos desarrollamos profesionalmente, las mujeres nos enfrentamos a retos cada vez más significativos, siendo uno de los más grandes la compatibilización entre la vida familiar y profesional. Particularmente, me apasiona mi carrera , pero amo profundamente mi rol como madre y esposa. Encontrar el equilibrio requiere organización, enfoque y, sobre todo, confianza en que es posible crecer profesionalmente sin dejar de lado nuestra esencia.
Nuestra empatía y sensibilidad son cualidades que enriquecen el estilo de liderazgo que las empresas buscan promover, con un enfoque de confianza, constancia y determinación. Si bien aún queda mucho por hacer, soy optimista al ver los avances que se han logrado en inclusión. Las mujeres seguimos demostrando nuestra capacidad para adaptarnos, pensar en múltiples direcciones y liderar equipos de forma efectiva, lo que tiene un impacto positivo en el crecimiento económico de las empresas y la industria en general.