+NOTICIAS.- Consolidar la marcha blanca del nuevo recinto incorporando nuevas prestaciones, reducir las listas de espera y obtener la primera acreditación de calidad del nuevo recinto asoman como tareas prioritarias.
Editado por Cris Meneses Galaz.
REGIÓN DE VALPARAÍSO, Quillota.- Una vez materializado el traslado de la atención cerrada y unidades de apoyo al Hospital Biprovincial Quillota Petorca en octubre pasado, este 2023 debiese ser el año de consolidación de la marcha blanca del nuevo recinto, en el cual asoman múltiples desafíos que esperan ir materializándose de manera gradual para dar respuesta a los requerimientos sanitarios de las 10 comunas del territorio.
INCORPORACIÓN DE NUEVAS PRESTACIONES
Cabe recordar que durante el año 2022 el traslado a las nuevas dependencias hospitalarias se realizó en modalidad de “espejo”, es decir, brindando la misma cartera de prestaciones existentes en el ex Hospital San Martín de Quillota, por lo que la incorporación de nuevas atenciones para los usuarios es una de las metas que están programándose para el año en curso.
De hecho, para este primer semestre del año se espera incorporar áreas estratégicas como son las de Salud Mental, la Unidad de Medicina Ambulatoria y habilitación de más camas en el sexto piso; esperándose para la segunda mitad del año en curso abrir nuevas áreas de atención y consolidar las ya existentes, de manera de mejorar posibles falencias que pudieran detectarse durante este proceso de marcha blanca en que está el Hospital Biprovincial Quillota Petorca.
PRIMER GRAN DESAFÍO
Al respecto, Haroldo Faúndez Romero, Director del recinto base de las provincias de Quillota y Petorca, señaló que la consolidación de las unidades existentes y la apertura de nuevas prestaciones aparece como un primer gran desafío para la institución: “El desafío para el año 2023 es que tenemos que ir aperturando, tenemos que ir llegando a la capacidad que tiene este hospital nuevo y ahí, en esa lógica, las prioridades son Salud Mental, tenemos que ver lo que es Medicina Ambulatoria y tenemos que habilitar más camas, camas de hospitalización ya que hay espacios todavía en que se pueden habilitar estas camas. Fundamentalmente eso, en una primera mirada de forma paulatina; obviamente hay otras prestaciones que hay que seguir desarrollando a futuro”.
DISMINUIR LAS LISTAS DE ESPERA
Otra de las áreas en que el personal hospitalario deberá poner especial empeño es en la reducción de las listas de espera, las que a nivel nacional y local se vieron incrementadas producto de los casi 3 años de pandemia, en los cuales la labor de los hospitales se centró en combatir al Covid 19, y hoy es un objetivo prioritario en materia sanitaria.
Desde octubre del año 2022 el Hospital Biprovincial se incorporó como recinto en la estrategia de los Centros Regionales de Resolución, que consiste en la asignación exclusiva de algunos pabellones para disminuir la listas de espera que puedan resolverse a través de Cirugía Mayor Ambulatoria, totalizando a la fecha más de 350 intervenciones quirúrgicas realizadas, incorporándose desde este mes de enero un segundo pabellón para esta estrategia, y esperándose incorporar un tercer pabellón en este primer semestre del 2023.
Además, ante los recientes anuncios del Gobierno de trabajar en la disminución de las listas de espera, pudiesen incorporarse nuevas estrategias como el uso de pabellones fuera del horario institucional para resolver la demanda de la población.
Al respecto, Haroldo Faúndez habló sobre el desafío 2023: “Sin dudas que las Cirugías Mayores Ambulatorias apuntalan o ayudan a la disminución de las Listas de Espera, una larga cantidad de cirugías pendientes son cirugías mayores ambulatorias. Estos son pabellones que están orientados a una alta productividad, es decir podemos hacer más cirugías con la misma capacidad instalada. En la estrategia del Ministerio de Salud, por lo menos entre enero y abril, hay un presupuesto orientado al financiamiento de extensiones horarias y de trabajos en día sábados, especialmente de cirugías”.
ACREDITACIÓN DE CALIDAD
Una tercera línea de trabajo prioritaria para el año en curso dice relación con preparar la primera Acreditación de Calidad ante la Superintendencia de Salud, tarea que se iniciará desde cero al ser el Hospital Biprovincial un prestador de salud nuevo que deberá demostrar el cumplimiento del Manual de Acreditación y la pauta de cotejo, de modo de asegurar a sus usuarios y funcionarios que además de ser un recinto nuevo, es seguro y de calidad para brindar prestaciones sanitarias a la comunidad.
A ello se suma el optimizar los flujos de atención clínica y administrativa de manera de incrementar la satisfacción usuaria, de modo tal de realizar los ajustes necesarios para el cumplimiento de dicho objetivo en medio de todo este proceso de Puesta en Marcha del nuevo recinto de más de 74 mil metros cuadrados.
